Las Casas Colgadas, Colgantes o Voladas, también Casas del Rey, son un conjunto de edificios civiles situados en la ciudad española de Cuenca. Se denominan así por poseer una parte de ellas en voladizo, o grandes balcones, sobresaliendo en la alta cornisa rocosa de la hoz del río Huécar.
Se tiene constancia de que fueron construidas en los siglos xv y xvi. A lo largo de su historia, han pasado por diversas remodelaciones, siendo las más recientes, la realizada durante la década de 1920 y la de 1966, debido al alto estado de degradación de las que quedaban en pie. Han sido utilizadas como viviendas de uso particular y casa consistorial.

Esta edificación es de estilo gótico y como dato curioso es importantes saber que los balcones que sobresalen son mucho más nuevos, pues se instalaron en 1927. Han servido como restaurante y albergan el Museo de Arte Abstracto el cual cuenta con más de 1.500 obras y alrededor de 40.000 visitas anuales. La entrada es totalmente gratuita.


Orientación: Estas casas están orientadas hacia el sureste, lo que significa que reciben sol directo principalmente por la mañana y hasta primeras horas de la tarde.
Estación del año:
- En verano, con días más largos y el sol más alto, las Casas Colgadas disfrutan de más horas de luz solar.
- En invierno, los días son más cortos y el sol está más bajo, por lo que el tiempo de exposición directa al sol se reduce.
Sombra natural: Al estar situadas en un entorno montañoso y rodeadas por las hoces del río, las sombras proyectadas por los acantilados y la propia topografía pueden reducir la cantidad de luz solar directa, especialmente en las horas finales de la tarde.
Cimientos: Se asientan directamente sobre la roca caliza del acantilado, adaptándose a la pendiente natural de la Hoz del Huécar.
Estructura principal: Está construida con muros de piedra en las zonas inferiores, proporcionando estabilidad y resistencia.

Fachada principal: Orientada hacia el acantilado y el río, presenta una mezcla de piedra y madera.
Balcones voladizos: Son de madera, sobresalen sobre la hoz del río y están sostenidos por vigas de madera que se anclan a la estructura principal. Son el elemento más característico de las casas y les dan su nombre.
